Dormir es despertarte en tus sueños.
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Un lugar con muchas luces es un
lugar con muchas sombras.
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El tiempo huye de ti antes de que lo
veas.
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Los cables están hechos para
tropezarse.
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Las mesas se divierten golpeando nuestros
dedos del pie.
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Los zapatos son los calcetines del
calcetín.
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El viento es el mejor amigo de tu
paraguas: se lo quiere llevar.
Javier Coves Toral
Las macetas de los balcones se
encuentran todos los días al borde del suicidio.
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Los flexos están cansados de estar
agachados.
Alba Gomis Román
Espejo: espía de defectos.
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Hiedra: planta amorosa.
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El enchufe se ha enfadado con el cable. Están que saltan
chispas.
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El bolígrafo está harto de que le maltraten por hacerse
viejo.
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El caracol trabaja en casa.
Susana Alapont Durá
Al juguete de mi perro le aterran sus dientes.
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Los peces nadan sin tener brazos ni piernas.
Gema Rodríguez Torremocha
La risa es un tranquilizante sin efectos secundarios.
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Las lágrimas, sean de felicidad o de tristeza, siempre llevan nombre y apellido.
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Ilusionarse demasiado pronto debería ser un delito.
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Una mentira puede dar la vuelta al mundo antes de que la verdad haya tenido tiempo para ponerse la falda.
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Los libros son la mejor máquina del tiempo.
Nuria Ortiz Pérez-Ojeda
Una almohada puede ser un objeto de consolación.
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Lo mejor de la noche es practicar
espeología en la cama.
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Los bolígrafos rojos de los
profesores, al ver un fallo en un examen, se convierten en Ferraris.
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La calculadora es el mayor genio
matemático.
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Fuente en el parque: ducha de
mendigos.
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El vapor es el resultado de un
incendio acuático.
Manuel García Maciá
Cuando abro las
ventanas bosteza la casa.
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El ruiseñor quiere
cantar ópera.
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Un piropo es una
droga.
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El viento se pelea
con las puertas de las casas.
Néstor Ferri Pérez
En la escuela me enseñaron a sumar y a restar, pero no a calcular lo que me rodea.
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Tienes que observar atentamente una
cosa para saber cuál es su verdadero significado.
Raúl Velázquez
Villalba
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